Tivoli ofrece muchas cosas que ver. Hay por todos los gustos; depende de lo que se quiere hacer y del tiempo a disposición: admirar las joyas artísticas testigos de un pasado glorioso, pasear entre los aceitunos de Pomada o recorrer la senda Naturaleza, sentarse en un típico restaurante para gustar los tradicionales platos culinarios de Tivoli.
Haga click aquí para leer las cosas que no hay que perder.
Si todavía no habéis decidido, aquí hay algunos consejos para apreciar plenamente incluso las bellezas tiburtinas, aunque el tiempo a disposición sea limitado.
En primer lugar, teneís que decidir cuánto tiempo transcurrir en Tivoli porque de eso dependerá lo que vais ver.
se puede visitar tranquilamente Villa d'Este y Villa Adriana dedicando la mañana a la una y a la tarde a la otra. De verano es preferible visitar Villa Adriana por la mañana, porqué Villa d'Este ofrece un jardín bastante sombreado, al ámparo de los ardientes rayos del sol veraniego. Si decidís visitar Tivoli el lunes, día de cierre de Villa d'Este, no desesperáis, podréis conocer la antigua ciudad de Tivoli recorriendo una o todas las tres rutas aconsejadas del casco antiguo (rojo, amarillo y verde).
es la elección justa que os permitirá conocer completamente las riquezas de la ciudad de Tivoli. Os aconsejamos visitar las dos Villas, Villa Adriana y Villa d'Este, en días diferentes, así de no cansarse demasiado y gozar plenamente el espectáculo ofrecido. En espera de la reapertura de la Rocca Pia, podéis mirar Villa Gregoriana o podéis recorrer los tres itinerarios aconsejados del casco antiguo (rojo, amarillo, verde) que os harán conocer los rincones más escondidos de la ciudad, con sus iglesias, los templos, los casas torres y las casas medioevales.
estacionar tres días en una pequeña ciudad como Tivoli podría parecer un poco excesivo, pero sepáis que no es así. Además de visitar lo que hemos propuesto antes, tenéis la posibilidad de decidir lo que ver el tercer día. Antes de todo, una vuelta por los alrededores de Tivoli al Santuario de Quintiliolo. Si sois amantes de la naturaleza, os aconsejamos, sobre todo en los meses que van de marzo a octubre, el bonito paseo de Pomata o la senda que lleva al antiguo Santuario de la Dea Bona, o bien, por fin, la senda Naturaleza que ofrece una fascinadora vista sobre la ciudad y sobre el Valle del Aniene. Si todavía quiereis ver más cultura, no hay que perder es la visita al Santuario de Hércules Vencedor, uno de los Santuarios romanos más importantes del mundo, pero hace falta solicitar la autorización a la Superintendencia Arqueológica por Lazio.
de este modo podéis enriquecer vuestro viaje haciendo una excursión a uno de los pueblos de la Valle del Aniene. Imperdible es por ejemplo la visita al Sagrado Speco, Monasterio de S.Benedetto y S.Scolastica, en Subiaco o al Santuario de la Suerte Primigenia en Palestrina.
Aquí desde siempre los tiburtinos veneran a "su" Virgen, la Virgen de Quintiliolo.
El parque, a los pies de la acrópolis, fue construido en el 1834...
Situado acerca del supuesto Templo de la Sibila Albunea...
Patrocinio Comune di Tivoli
Assessorato al Turismo